Apenas una inmedible fracción
de la más pequeña unidad de abismo
y mi mano
explorador indeciso
se detiene
y vuelve a su rincón.
Apenas callo
cuando el silencio
como una gran esponja
absorbe en mi garganta las palabras
no
dichas.
Apenas un instante
desde botes salvavidas raídos y rotos por el deseo
contemplan
mis ojos
antes de sucumbir
las luces de la orilla
Resignada
espero
a este lado
de la piel.